El tratamiento Exilis es una técnica eficaz, de últimos avances tecnológicos que consigue trabajar diferentes zonas de la cara y el cuerpo. Está diseñada, sobre todo, para personas que buscan un rejuvenecimiento facial o reducción de grasa corporal de forma indolora y rápida. Es un proceso reafirmante facial que estimula la producción de colágeno, consiguiendo mayor elasticidad y tersura en la piel.

En cuanto a reducción de grasa corporal, el tratamiento Exilis es ideal para aquellos pacientes que no son partidarios de una cirugía invasiva. Esta técnica permite tratar grasa localizada y la flacidez de la piel sin anestesia, además actúa sobre la celulitis y las estrías consiguiendo el tensado de la piel.

Gracias al tratamiento de radiofrecuencia monopolar se consigue llegar a capas más profundas de la piel, utilizando la tecnología de ultrasonidos se llega a fragmentar las moléculas de grasa.

Antes de comenzar el tratamiento se aplica un gel transmisor y se coloca una plaquita de transmisión sobre la piel en una parte opuesta de la zona a tratar. Después, modulando la temperatura, en torno a los 40 grados, con unos movimientos circulares se distribuye la energía de radiofrecuencia sobre las fibras de colágeno envejecidas para estimular la formación de colágeno nuevo y conseguir un estiramiento facial suave y natural.

Los resultados se consolidan a lo largo del tratamiento – se recomiendan unas 4 sesiones en 3 meses durante aproximadamente un año-, sin cambiar los gestos ni la expresión de la cara.

Muchos pacientes comparan el resultado del tratamiento exilis con los de un lifting sin cirugía. Las zonas en las que, especialmente, se nota la mejoría son:

• Mejillas.
• Frente.
• Contorno de los ojos.
• Óvalo y cuello.
• Flacidez acumulada en los bordes del mentón y los maxilares.